jueves, 26 de noviembre de 2009

Salluste




Después de la derrota francesa de 1870 y la caída del Imperio de Napoleón III, los marxistas, dirigidos desde Londres por Karl Marx, se adueñaron de París el 18 de marzo de 1871 por más de dos meses, con apoyo de la guardia nacional que se había constituido en un organismo armado totalmente dependiente de la Internacional marxista.

Cuando la Comuna no pudo resistir el ataque de las tropas del gobierno que tenían su sede en Versalles, y al considerar los comunistas segura su derrota, se dedicaron al robo, al asesinato y al incendio para destruir la capital de acuerdo con la consigna dada anteriormente por Clauserets en 1869: “¡Nosotros o nada! Yo os afirmo: París será nuestro o no existirá más”.

En esta ocasión quedó claramente manifiesta la complicidad de los banqueros judíos franceses con los comunistas, al constatar como lo señala Salluste en su libro “Les origines secrètes du bolchevisme”- que Rothschild, por una parte, hacía presión en Versalles ante Thiers, presidente de la República, para evitar una acción decidida del ejército en contra de los comunistas marxistas, hablando de posibles entendimientos y acomodos con el Comité central de los Federados (marxistas); y por otra parte, gozaba de una total impunidad tanto en su persona como en sus bienes en la ciudad de París, sumida en un espantoso y sangriento caos.

A este respecto nos dice Salluste en su obra citada, pág. 137:“M. de Rothschild es cierto que tenía buenas razones para creer posible la conciliación: su chalet de la calle Saint-Florentin estaba protegido día y noche por un piquete de federados (marxistas) encargados de evitarle cualquier depredación, piquete que estuvo renovándose durante dos meses hasta el momento en que la gran barricada que se levantaba a dos pasos de ahí fue tomada por las tropas de Versalles”

“Cuando los rehenes eran fusilados, cuando los más bellos palacios de París ardían y millares de franceses morían víctimas de la guerra civil, es curioso constatar que la protección acordada por los comunistas al gran banquero judío no cesó por un momento”.


Fuente: Les Origines Secrètes du Bolchevisme



Salluste


--------------------------------------------------------------------------------------

No hay comentarios:

Publicar un comentario